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Mantener una interacción con el usuario simple y natural.
Intefaz adaptados al momento, dispositivo de uso y siempre con sencillez y limpieza en el diseño, sin complejidades y de fácil manejo
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Hablar el mismo idioma que el usuario.
Mantener un lenguaje que el usuario entienda, huyendo de lenguajes informáticos o de negocio.
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Minimizar recordar procesos.
El usuario no está preparado para recordar es la máquina, la lógica del software (geolocalización, cámara de fotos, qrs) que tiene que hacer esta tarea y los procesos deben ser lo suficientemente intuitivos para que no sea necesario memorizarlo.
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Crear mensajes de error constructivos.
Los mensajes deben ayudar al usuario a corregir errores
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Interacción clara y rápida.
Cuanto menos piense el usuario mejor, dar la facilidad para que pueda continuar/grabar o salir de un proceso de forma rápida y sencilla
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Añadir atajos.
Para los usuarios expertos sin perjudicar a los usuarios noveles
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Dar feedback al usuario en todo momento.
Siempre decir al usuario que está pasando de los usuarios, lo bueno y lo malo, el paso del proceso.
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Prevenir errores.
Anticiparse antes de que el usuario lo cometa
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Luchar por la consistencia.
Entre las plataformas, aplicaciones o portales donde esté tu software.
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Nunca olvidarse de ningún principio mencionado con anterioridad
😉